Un día antes de ayer (o sea antes del Día de las Madres) le pregunté a un amigo qué le iba a dar a su mamá para esa fecha tan especial donde el Facebook se llena de vítores, halagos y odas a las increíbles mujeres que somos. Me dijo que le daría unos zapatos especiales y una explicación que perdí en mi mente. Cuando le pregunté sobre el regalo que le daría a su esposa me dijo, entre apenado y burlón, que tenía que buscarle algo muy bueno (¡Una tarde antes!), pues la había hecho enojar con el gracioso comentario: “Es del día de la madre, no de la esposa”, cuando ésta le preguntó sobre su tan esperado regalo.
¿Cómo es eso? ¿La mujer, madre de sus hijos, se enojó por esa respuesta chistosita? ¡Pues CLARO que sí! No sólo, porque obviamente es la madre de sus hijos (y si…
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